Lo que empezó siendo un trabajo de fin de carrera para la Universidad de Sevilla ha llegado a convertirse en una de las empresas andaluzas más exitosas del sector de las energías renovables. Green Power Technologies (GPTech) nació de la mano de Javier Landeros, su actual Director General. Tal y como él mismo cuenta, al abordar este incipiente nicho de mercado, «el primer paso tenía que ir encaminado a encontrar la conexión que permitiese introducir las energías renovables en las infraestructuras eléctricas actuales». Su primer estudio concluyó que el enlace clave se encontraba en la electrónica de potencia y desde entonces la empresa se ha convertido en uno de los ejemplos más nítidos de éxito empresarial a partir del conocimiento universitario.
El futuro de la generación de energía a nivel mundial viene virando, desde hace varios años, hacia el camino de las renovables. Fuentes naturales inagotables que sean capaces de paliar el impacto medioambiental y conseguir crear un sistema sostenible y equilibrado que sustituya a las eléctricas convencionales. Esta cuestión adquirió un enorme protagonismo a partir del Protocolo de Kioto sobre el cambio climático del año 1997, un acuerdo internacional en el que se propuso como objetivo reducir las emisiones causantes del efecto invernadero. Aunque hubo que esperar varios años para que su validez se hiciese real, el convenio se convirtió en el detonante del que surgieron nuevas conciencias y proyectos que entendieron, por aquel entonces, que los sistemas convencionales de energía iban a vivir una transición inminente hacia otras formas de producción.
introducir las energías renovables en las infraestructuras eléctricas actuales ha convertido a GPTech EN UN CLARO EJEMPLO DE ÉXITO EMPRESARIAL A PARTIR DEL CONOCIMIENTO UNIVERSITARIO
GPTech nació en este contexto de auge de las renovables en el año 2002 y, desde entonces, ha mantenido una estrecha vinculación con la Universidad de Sevilla mediante la cooperación con grupos de investigación o mediante la contratación de egresados procedentes de la Hispalense. De hecho, el 80% de la plantilla de GPTech son licenciados en titulaciones tales como Derecho, Química, Física o Ingeniería. Gracias a ello, la empresa llega a facturar en la actualidad por encima de los 28 millones de euros, lo que demuestra que la energía renovable es un sector maduro y consolidado en el mercado.
Asimismo, esta alianza institucional se ha materializado recientemente en el Premio al Mecenazgo Empresarial que el Consejo Social de la Universidad de Sevilla concedió el pasado mes de noviembre a GPTech en la modalidad de pymes. El acto de entrega del galardón estuvo presidido por el rector de la Universidad de Sevilla, Miguel Ángel Castro, y la presidenta del Consejo Social, Concha Yoldi, quien destacó a la empresa galardonada por «el carácter innovador de sus acciones y su proyección exterior durante los últimos años». En representación de GPTech recogió el premio Eduardo Galván, socio fundador de la empresa, que valoró este premio como «un reconocimiento al equipo humano de su empresa, a su profesionalidad y su esfuerzo». En su discurso de agradecimiento, insistió en que su empresa aún no había alcanzado su límite, y enumeró sus proyectos futuros fijando como objetivo primordial «expandir globalmente sistemas eléctricos más sostenibles, eficientes y baratos».
Esta empresa andaluza, que no hace más que crecer, ya realiza en el extranjero entre el 90 y el 95% de todos sus proyectos. Su expansión geográfica es global, y cuenta con actividades en multitud de países europeos, Norte América, Latinoamérica, zonas del sur de África y recientemente también en Oriente Medio, contando así con varios proyectos en Jordania. Sus planes futuros abarcan a su vez a Egipto, Marruecos y otras zonas del norte de África. Según Javier Landeros, «constituyen regiones de gran potencial para el desarrollo de este tipo de energías». Si bien desde GPTech no se ha descartado la idea de expandirse en España, su director reconoce que desde el comienzo de la crisis financiera las políticas de recorte y los cambios regulatorios «han provocado una parálisis de la inversión en nuevas estructuras para este sector».
Sin embargo, con el reciente Acuerdo Medioambiental de París, Landeros prevé un posible impulso para estas actividades en muchos países, ya que supone una garantía de que el marco global va a potenciar en el futuro una financiación mayor de este tipo de proyectos. Pese a ello, también afirma que el aumento de la competitividad puede ser una «posible consecuencia» de este tipo de iniciativas internacionales.
Las energías renovables, aunque pueden seguir sonando como una tecnología novedosa, suponen un sector ya maduro, que se consolida como un modelo muy competitivo en costes. Tanto es así que la suma de energía eólica y fotovoltaica es, a día de hoy, la que más se instala año a año, según el informe global Renovables 2016 publicado por REN21. Se convierte así en un modelo energético más competitivo que la generación convencional de térmicas o nucleares según qué región y condiciones. De ahí que GPTech centre cada vez más su trabajo en el valor añadido, por ejemplo, dando soluciones tanto de equipo, de servicio de consultoría, ingeniería y software, así como dedicando al I+D en torno al 10% de sus beneficios anuales. Por lo tanto, el futuro del sector supone para Javier Landeros trabajar en nuevos proyectos donde el almacenamiento va a ser la pieza clave y «va a suponer una revolución a nivel mundial: cuanta más capacidad de almacenamiento de la energía, más flexibilidad de uso y, por tanto, mayor eficiencia».
LA EMPRESA ANDALUZA REALIZA MÁS DEL 90% DE SUS PROYECTOS EN EL EXTRANJERO, EN REGIONES COMO LATINOAMÉRICA, NORTEAMÉRICA Y EL SUR DE ÁFRICA
El sector de las energías renovables conlleva a día de hoy numerosos retos para los que trabajan en él. Según Landeros, son estos los que «les permiten crecer y, seguir luchando día a día por conseguir mejores soluciones para construir así, un futuro mejor». Por ahora, la hoja de ruta de GPTech apuesta por una estrategia basada en el capital humano, el conocimiento y la creación de valores sostenibles, pues tal y como cuenta su director general «llevar la energía a todos los sitios posibles de la manera más limpia y competitiva sin afectar al medio ambiente es el objetivo principal de GPTech».