Compartir

La Universidad de Sevilla volvió a ser la elegida para acoger al III Congreso Internacional de Soft Skills, centrándose esta vez en dos habilidades concretas: la comunicación y el liderazgo. Celebrado el 1 de diciembre en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, coincidiendo con el 50 aniversario de la institución, el Congreso, aunque también podía seguirse por streaming, atrajo a un público bastante numeroso y muy joven. Los presentadores, Pedro Marcos e Izaskun Unzain, se mostraron con gran entusiasmo de dar comienzo a este III Congreso, en el que se contaba con invitados de prestigio como Cristina Soria, periodista y coach o Ramón Rodríguez, más conocido como Monchi, quien ya es un veterano en el Congreso de Soft Skills.

El encuentro comenzó con una primera parte protocolaria de bienvenidas y agradecimientos en la que participó Concepción Yoldi, presidenta del Consejo Social de la Universidad de Sevilla; Juan Espadas, alcalde de Sevilla; Gabriel Cepeda, director de la Cátedra Efic Idipe; Antonio Navarro, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales y Miguel Ángel Castro, Rector Magnífico de la Universidad de Sevilla. Además, estos altos cargos aprovecharon para presentar el motivo y objeto del Congreso y abrir el camino al resto de invitados. El alcalde aprovechó su intervención para mostrar a todos los presentes lo necesario que es salir de la zona de confort para poder avanzar y, junto al resto, recalcó la importancia de estas habilidades blandas -o habilidades transversales, como Concepción prefiere denominarlas- tanto a nivel profesional como a nivel personal.

Tras esta primera parte, llegó el momento de los invitados. «Hay que hacer el pino para ver las cosas derechas», así comenzaba su charla Tania Lamarca, medalla de oro en las Olimpiadas de 1996 que, una vez solucionados los problemas técnicos de Zoom, habló de su experiencia como gimnasta y de cómo luchó hasta llegar a las Olimpiadas a pesar de las adversidades. Durante su intervención remarcó que el esfuerzo y la recompensa van de la mano. Lamarca dio una serie de consejos al público como, por ejemplo, realizar lo que ella hizo cuando no entró en la selección española: recordarte a ti mismo por qué empezaste a luchar cuando tu energía y ánimos bajan; a lo que añadía que la actitud que cada uno pone en lo que hace, es lo que le define. 

Fue cuando la medallista terminó su intervención cuando llegó el invitado de oro para muchos de los presentes entre el público, al grito de «¡grande Monchi!» apareció el director deportivo del Sevilla Fútbol Club, Ramón Rodríguez, quien también tuvo que realizar su intervención vía Zoom. No era este el primer Congreso de Soft Skills de Monchi, quien afirmaba disfrutar enormemente cada vez que lo hacía. 

«Ser un líder no consiste en crear seguidores, sino nuevos líderes»

Monchi, director deportivo del Sevilla Fútbol Club

Liderazgo; fomentar la autoestima; la autocrítica; el inconformismo; el trabajo en equipo; la resiliencia y la pasión, son las siete claves que siempre han acompañado a Monchi, tanto en su vida laboral como en la personal, y que aconsejaba a todos los presentes incorporar en sus caminos. «Ser un líder no consiste en crear seguidores, sino nuevos líderes» afirmaba el director deportivo, añadiendo que para lograrlo es necesario fomentar la autoestima de todo el que te rodea, así como escuchar de manera empática y no dar órdenes, sino aconsejar. «Solo los que arriesgan a ir demasiado lejos, son los que descubren hasta dónde pueden llegar» dijo Monchi animando al joven público a ser inconformista con ellos mismos. Una vez despedido, algunos asistentes abandonaron junto a él la sala, dejando claro que solo acudieron para escucharle. 

Llegó así la primera intervención presencial, una mesa de debate con la periodista Isabel Morillo como mediadora, acompañada por Luis Muñoz y Juan Jesús Velasco, dos jóvenes ingenieros emprendedores que buscaban ser ejemplo para los asistentes, los cuáles, para sorpresa de los presentadores, admitieron su gran interés en emprender en el futuro. Juan Jesús, es dueño de El Cubo una aceleradora de startups, por su parte, Luis es dueño de Solum, una empresa que carga la batería de los patinetes eléctricos mediante baldosas del suelo y que, además, fue cliente de Jesús en sus inicios. Ambos hablaron de su experiencia y de lo que emprender requiere, coincidiendo en que «emprender lleva implícito la palabra riesgo», pero que no se le debe tener miedo. Durante la mesa de debate los jóvenes ingenieros destacaron una de las claves antes dadas por Monchi, el trabajo en equipo, el cual afirman que es necesario para que una startup salga adelante.

«Emprender lleva implícito la palabra riesgo, pero no se le debe tener miedo»

Luis Muñoz, ingeniero industrial y VP of product & marketing

Risas, participación y dinamismo definen la intervención de Cristina Soria que llegó tras el descanso iluminando los rostros del público que se mostró más participativo que en las demás charlas, haciendo así honor al nombre puso a su presentación: “El poder de la sonrisa”. La periodista y experta en microexpresiones logró animar al público, haciendo más ameno el Congreso tras unas horas desde su comienzo. La ponente aprovechó su presentación para dar una pequeña clase de microexpresiones en relación con la sonrisa, pues como contaba «no todas las sonrisas son verdaderas» y enseñó cómo podemos identificarlas, así como los beneficios que trae consigo sonreír.

No sería esta la única intervención de Cristina Soria, pues también fue una de las participantes de la mesa redonda dirigida por la periodista Ana García Lozano.  En esta mesa participaban, además de Cristina, Concepción Yoli, que fue una incorporación de última hora; Pedro la Calle, joven estudiante ganador de Speaker Talent; Patricia Alcudia, coach, ingeniera y miembro del órgano de Gobierno de la Women Network y, por último, Julio Arnas, coach y emprendedor en The Owl Proyect.

Los participantes estuvieron debatiendo sobre la evolución de las Soft Skills en entornos sociales y de cómo la pandemia, y su consecuente confinamiento, les sirvió para realizar un viaje a su interior. De gran interés fueron las intervenciones de Patricia Alcudia, Julio Arnas y Pedro La Calle. Patricia señalaba que las personas no nacemos siendo líderes, sino que aprendemos a serlo y, para ello, se están promoviendo las Soft Skills en los entornos laborales. Julio dio un discurso sobre lo importante que es la aceptación, tanto de uno mismo como de las demás personas, «lo que nos diferencia es lo que nos define, lo que nos permite ser, es la marca personal que se queda de ti cuando ya te has ido» Por último, Pedro La Calle apostaba por la creatividad en los colegios e institutos, pese a la negativa de algunos profesores, ya que, como afirmaba, la creatividad ayuda a aprender nuevas formas de gestionar las emociones y los conflictos mediante las Soft Skills.  

«Las personas no nacemos siendo líderes, sino que aprendemos a serlo y, para ello, se están promoviendo las soft skills en los entornos laborales»

Concha Yoldi, presidenta del Consejo Social de la Universidad de Sevilla

Llegaba, finalmente, la última parte de este Congreso con Julio Muñoz, conocido como El Rancio en las redes sociales. Casualidad o intencionado, fue esta última intervención la más divertida del Congreso, los pocos asistentes que quedaban en la sala disfrutaron y rieron desde el primer minuto. El Rancio, consciente de que tras tantas horas el público estaría cansado, quiso ser breve y ameno y así lo consiguió. Finalizó su charla con varios consejos, en primer lugar, recalcó la importancia de la empatía y de preguntarse si lo que haces solo te satisface a ti o si puede tener futuro y, en segundo lugar, la importancia de tener claro tu objetivo. A pesar de durar más tiempo de lo previsto y de algunos problemas técnicos con la conexión vía streaming, el III Congreso Internacional de Soft Skills fue un éxito, una oportunidad única para aprender sobre la comunicación y el liderazgo de la mano de profesionales de prestigio.  

No hay comentarios

Dejar una respuesta